Construir puentes, no sólo Apps
Para Mario Ríos, responsable de tecnología operativa en Smith+Nephew, el objetivo no es sólo implantar nuevas herramientas digitales. Es servir de "puente" entre la gente del taller y la tecnología que puede hacerles la vida más fácil. Con sede en Costa Rica, Mario dirige un equipo de ingenieros de OT, proporcionando orientación técnica y estratégica a través de múltiples centros de fabricación.
Con formación en ingeniería mecatrónica, Mario siempre ha sido un constructor. Durante sus ocho años en Smith+Nephew, ha pasado por diversas funciones, desde la ingeniería de mantenimiento hasta el trabajo con los PLC y las HMI de complejos procesos de fabricación química. Su viaje con Tulip comenzó hace cuatro años cuando se unió a una organización de digitalización recién formada. Fue introducido a Tulip e inmediatamente vio su potencial para el sitio de Costa Rica. Mario reconoció que era una herramienta que podía capacitar no sólo a los operarios de planta, sino también a los desarrolladores como él que querían construir y desplegar rápidamente soluciones transformadoras.
De una sola aplicación a un movimiento en todo el sitio
Abordando un ambicioso primer proyecto tras sólo un mes de uso de la plataforma, Mario construyó una aplicación de seguimiento de desechos para la sala blanca. El proyecto era una iniciativa impulsada por la calidad, construida sobre una asociación fundacional con el departamento de Calidad. Esta estrecha colaboración fue fundamental, ya que proporcionó el patrocinio y el profundo conocimiento de los procesos necesarios para el éxito. Mario también trabajó estrechamente con los operarios para aprender todos los matices y entresijos del proceso. La aplicación mostró su impacto en cuestión de días. Para Mario, éste fue un momento crucial, que solidificó su visión de cómo las herramientas sin código podían empoderar tanto a los operarios como a los desarrolladores digitalizando rápidamente los procesos y proporcionando datos en tiempo real.
Armado con esta nueva perspectiva, Mario se ganó eficazmente a sus aliados, a pesar del escepticismo inicial. "Me decían: 'Vale, esto es sólo el sabor del mes'", dice de los operarios y supervisores que habían visto ir y venir otras iniciativas. Su estrategia consistió en generar confianza demostrando el valor, un caso de uso cada vez. Al resolver puntos de dolor reales en el taller, convirtió a los escépticos en defensores. "Una vez que vieron los beneficios, empezaron a proponer ideas", señala Mario. "Ahora siempre bromeo diciendo: "Probablemente me jubile y para entonces no habremos hecho ni la mitad... ¡hay tanto que podemos hacer!". 
Desbloquear la trazabilidad de extremo a extremo
Esa creciente confianza le llevó a su mayor reto hasta la fecha. A finales de 2022, el centro identificó una oportunidad clave para mejorar su visibilidad operativa en tiempo real. Aunque el ERP servía como sistema de registro, el desfase temporal entre el progreso físico de una orden de trabajo y su actualización digital presentaba una oportunidad de optimización. Mejorar este aspecto podría ayudar a agilizar las entregas y reducir el inventario de trabajo en curso. El jefe de obra le dio una directiva clara y urgente: "Sólo necesito saber dónde están mis órdenes de trabajo". Mario y un pequeño equipo de desarrolladores ciudadanos tenían sólo tres semanas para ofrecer una solución.
El planteamiento de Mario consistió en partir de un éxito anterior, un sistema de envasado a la exportación que había implantado con Tulip que optimizaba el envío del inventario envasado a la esterilización. Ese sistema ya había dado resultados significativos, incluida una reducción del 70% en el inventario de productos acabados y una reducción del 33% en el espacio de almacén.
Utilizando esto como base, Mario se puso manos a la obra para construir un sistema de seguimiento integral que utiliza Tulip para la captura de datos y PowerBI para la elaboración de informes. "La primera versión que construimos no tenía una interfaz de usuario bonita", admite, "pero funcionaba. Capturaba los datos que se necesitaban, y fue entonces cuando vi el valor real del low-code, porque puedes lanzarlo rápidamente e iterar muy, muy rápido." Desde el primer día, el sistema proporcionó un nivel de información en tiempo real que el sitio nunca había tenido antes. A medida que aprendían más sobre el proceso, iteraban constantemente. Algunas aplicaciones del sistema pasaron por más de 50 actualizaciones.
El verdadero avance se produjo cuando la gente empezó a confiar en los datos. Comenzó a producirse un cambio cultural. "Ya no era tu Excel contra mi Excel", dice Mario. Los equipos consultaban la misma fuente de verdad, mejorando la comunicación y centrándose en analizar los datos, no sólo en capturarlos.
El impacto fue asombroso. La solución redujo drásticamente el inventario de trabajo en curso y el tiempo necesario para consolidar las cargas de envío, y la colaboración entre los equipos se disparó. "Ya no luchaban unos contra otros", afirma. "Estaban tirando del esfuerzo en la misma dirección, algo que fue muy, muy asombroso de presenciar".
Crear una cultura de mejora continua
Para Mario, el desarrollo ciudadano ha cambiado fundamentalmente su forma de abordar la resolución de problemas. Donde antes buscaba la perfección, ahora persigue el progreso. Esta nueva mentalidad - "Fallar rápido, aprender rápido y seguir iterando"- le ha permitido ofrecer valor de forma continua y descubrir beneficios inesperados por el camino. Describe el "efecto dominó" de sus aplicaciones, compartiendo cómo los operadores aportarán información para abordar nuevas oportunidades y casos de uso.
Este impacto no se limita a las soluciones; Mario está cultivando activamente una nueva generación de desarrolladores ciudadanos en Smith+Nephew. Gente del taller se asoció con Mario en funciones temporales, donde él les entrenó no sólo sobre cómo utilizar la plataforma, sino "cómo hacer frente a todos los desafíos de desplegar aplicaciones e impulsar la adopción." Esta tutoría creó verdaderos itinerarios profesionales. Muchos de los que formó han pasado desde entonces a desempeñar otras funciones dentro de la empresa o en otras compañías. Para Mario, fue una forma de permitirles "estar en un lugar donde podían brillar".
Ahora, Mario está formalizando este movimiento de base lanzando una comunidad de desarrolladores ciudadanos en Costa Rica. El objetivo es capacitar a los ingenieros para que construyan soluciones a menor escala, como un cuaderno de bitácora digital, que resuelvan problemas inmediatos mientras el equipo central de OT se centra en iniciativas de mayor envergadura para todo el sitio, como MES o eDHR. Adaptando un programa "Usuario como desarrollador" de un sitio hermano, ya está viendo una oleada de interés. "La gente parece muy entusiasmada", señala, "y hay mucho interés en aprender a utilizar la herramienta".
Su consejo para los aspirantes a constructores es sencillo: "Simplemente empieza. Usted no necesita ser un ingeniero de software para construir grandes cosas con Tulip. Todo lo que necesitas es lógica básica, curiosidad y la mentalidad adecuada".
Celebrando a los innovadores
Los premios Groundbreaker de Tulip reconocen a los individuos, equipos y empresas que están dando forma al futuro de las operaciones.