Con más empresas de fabricación surgiendo cada día y haciéndose con porciones de la base del mercado, las marcas deben ser diligentes a la hora de gestionar sus procesos de producción. No hacerlo puede dar lugar a que los clientes se pasen a competidores mejor equipados para cumplir los pedidos según las especificaciones, a tiempo y de forma más rentable.
Para mantenerse al día, los fabricantes necesitan tener una visión precisa de lo que ocurre en su taller en todo momento. Por ello, los fabricantes más avispados han implantado mecanismos de control del taller que les ayudan a tomar decisiones informadas sobre el trabajo que se realiza en todas sus operaciones.
Cuando las plantas de fabricación instalan y aplican correctamente sistemas de control de taller, están destinadas a ver una mejora en la eficiencia de la producción, la moral de los empleados y el cumplimiento de los pedidos. Y, por extensión, esto redundará en una mayor satisfacción del cliente.
Por lo tanto, es prudente que las empresas de todas las industrias manufactureras adopten sistemas modernos de control de taller para asegurarse de que pueden gestionar eficazmente sus operaciones para mejorar el éxito empresarial.
Siga leyendo para saber más sobre el control del taller y cómo puede ayudar a los fabricantes a mejorar continuamente sus operaciones y mantener una ventaja competitiva en el mercado.
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Una visión general del control de taller
En pocas palabras, el control de taller es un conjunto de procedimientos empleados por los fabricantes para realizar un seguimiento, programar y obtener una imagen precisa de los acontecimientos que tienen lugar en sus instalaciones de producción.
En la mayoría de los entornos de fabricación, los gerentes han tenido históricamente que llevar un control manual de las actividades de la planta de producción. Estos métodos manuales suelen implicar el seguimiento de los lotes de producción mediante sistemas basados en papel aplicados a diversos intervalos a lo largo del día.
Este trabajo manual no sólo consume un tiempo considerable, sino que además no proporciona a los responsables de la toma de decisiones la información respaldada por datos que necesitan para gestionar el proceso de producción cuando es necesario. Esto deja a los supervisores en una posición en la que responden a los problemas de forma reactiva, no proactiva.
Muchos fabricantes se han pasado a la forma tecnológicamente más avanzada de gestionar la línea de producción: los sistemas digitales de control de taller. Estos modernos sistemas de control aprovechan el avance de la Industria 4.0 para proporcionar visibilidad en tiempo real de la línea de producción y otras actividades relevantes en la planta de producción.
Con la interconectividad en la planta que permiten los recientes avances en la fabricación, los sistemas de control realizan un seguimiento de la mano de obra y las máquinas para proporcionar a los ejecutivos, gerentes y supervisores instantáneas en tiempo real de sus sistemas y procesos de producción.
Y con una información tan fiable, los responsables de la toma de decisiones pueden optimizar el proceso de producción como consideren oportuno, lo que se traduce en una serie de beneficios para la empresa.
Ventajas de digitalizar el control del taller
Como ya se ha dicho, los sistemas avanzados de control de taller acercan a las empresas manufactureras a la vanguardia. Al fin y al cabo, proporcionan varias ventajas sobre sus homólogos tradicionales, basados en papel. Algunas de estas ventajas incluyen:
Acceso a la información de la línea de producción en tiempo real
Con el control manual del taller, los responsables a menudo tienen que esperar al final de una tirada de producción para recibir información sobre las órdenes de trabajo y la productividad. Como resultado, los datos recopilados suelen dejar de ser útiles para que los supervisores tomen decisiones en tiempo real y realicen un seguimiento proactivo de la producción e influyan en ella.
Pero con la introducción de los sistemas digitales, los supervisores y gerentes tienen acceso a información en tiempo real procedente de la planta de producción. Esto significa que el personal pertinente sabe con precisión lo que ocurre en la línea en el momento concreto en que ocurre, lo que les permite responder con mayor rapidez a los problemas que puedan surgir.
Reducción de los costes de producción
Los sistemas tradicionales requieren que el personal rellene diversos papeles para capturar la información del taller. Pero como se trata de una tarea que requiere mucho tiempo, las empresas suelen contratar empleados a tiempo completo para ejecutar estas tareas.
Como resultado, la gestión de la documentación puede convertirse rápidamente en un proceso que consume muchos recursos y que, en última instancia, incrementa los costes de producción.
Al digitalizar la documentación con un sistema digital de control de taller, los fabricantes permiten a sus empleados centrarse en las tareas principales que hacen avanzar el proceso de producción. Además, los sistemas digitales de taller capturan, procesan y almacenan los datos automáticamente, eliminando la necesidad de una costosa gestión de documentos.
Apoyo eficaz y oportuno de la dirección
La planta de fabricación suele estar físicamente alejada de las oficinas ocupadas por el personal de gestión. Por ello, la comunicación con los distintos departamentos de una planta de producción puede ser larga y enrevesada cuando se necesita ayuda.
Los sistemas avanzados de control de taller evitan esta ineficacia conectando los departamentos de toda la fábrica y agilizando la comunicación. Los gerentes tienen acceso instantáneo a la información predominante sobre el estado de la producción, lo que les permite proporcionar apoyo oportuno a las personas en la planta de producción.
Esto enlaza entonces con el punto anterior relativo a la reducción de los costes de producción. Al fin y al cabo, la intervención y la orientación oportunas pueden evitar que un pedido se retrase si no se abordan los cuellos de botella predominantes.
Mejora continua de los procesos de fabricación
A fin de cuentas, si los fabricantes no se mantienen por delante de su competencia adoptando una cultura de mejora continua, lo más probable es que se estén quedando atrás. Una de las mejores formas de seguir siendo competitivos es optimizando los procesos para crear un modelo de fabricación lo más eficiente posible.
Los sistemas digitales de control de taller proporcionan una visión coherente y en tiempo real de los procesos de fabricación, lo que permite a los directivos identificar las principales oportunidades de mejora. En consecuencia, los directivos pueden aplicar estas soluciones a otras áreas aplicables, consiguiendo un mejor proceso de fabricación en todos los ámbitos.
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