Para los propietarios o gestores de fábricas, adoptar el concepto de mantenimiento autónomo es una de esas estrategias que tiene sentido a varios niveles.
Si se aplica correctamente, el mantenimiento autónomo beneficiará a todos los interesados en el funcionamiento eficaz de la fábrica. Como ventaja adicional, también puede elevar la moral del personal, haciendo más felices tanto a sus equipos de mantenimiento como a los operarios de sus máquinas.
En este post, ofreceremos una visión general del mantenimiento autónomo y de las ventajas que esta estrategia puede aportar en lo que respecta a la conservación y el mantenimiento de los equipos industriales.
¿Qué es el mantenimiento autónomo?
El mantenimiento autónomo es una estrategia en la que se otorga a los operarios de las máquinas de una planta de fabricación la responsabilidad de realizar las tareas básicas de mantenimiento de las máquinas y equipos que supervisan, en lugar de dejar el trabajo en manos de técnicos de mantenimiento especializados.
El concepto suele formar parte de una estrategia más amplia diseñada para mantener y prolongar eficazmente la vida útil de la maquinaria de fabricación. De hecho, es una parte tan fundamental del proceso que constituye el primero de los "ocho pilares" que conforman la metodología del Mantenimiento Productivo Total (TPM ) para la gestión de activos, establecida desde hace mucho tiempo.
Las ventajas del mantenimiento autónomo
El principio fundamental en el que se basa el mantenimiento autónomo es que si los operarios tienen las habilidades y la autoridad necesarias para mantener los equipos con los que trabajan, evitarán averías y liberarán a los técnicos de mantenimiento para que puedan centrarse en tareas más complejas. Pero también puede desencadenar otra serie de beneficios, tanto financieros como no financieros:
Detección precoz de problemas - Como trabajan tan estrechamente con el equipo, los operarios están en la mejor posición para darse cuenta cuando algo empieza a ir mal con una pieza de maquinaria. Están a mano para tomar medidas inmediatas que eviten una avería potencialmente costosa.
Mejor cumplimiento de los programas de mantenimiento - Los operarios formados para llevar a cabo tareas básicas de limpieza, lubricación y otros trabajos de mantenimiento en sus máquinas tienen más probabilidades de realizar esas tareas según el programa prescrito que los técnicos de mantenimiento con toda una fábrica llena de maquinaria de la que preocuparse.
Mayor seguridad - Con operarios formados para estar atentos a las averías e intervenir para evitar que se produzcan, se reduce la posibilidad de que se produzcan accidentes relacionados con el equipo. Contar con un régimen de limpieza y mantenimiento regulares también reduce la probabilidad de que se acumulen residuos y suciedad alrededor de una máquina, o de que se dejen herramientas tiradas, lo que reduce aún más el riesgo de accidentes.
- Mejora de la dinámica de equipo - Hacer que los operarios asuman más responsabilidad por el funcionamiento eficaz de su maquinaria les da un mayor sentido de propósito y eleva su papel dentro de la organización. También alivia la mentalidad de "nosotros y ellos" que puede desarrollarse entre los operadores de maquinaria y los técnicos de mantenimiento. Con un enfoque de mantenimiento autónomo, todos sienten que están trabajando por el mismo objetivo: mantener la fábrica funcionando sin problemas.
Mantenimiento autónomo frente a mantenimiento preventivo
Si es usted un profesional de la fabricación, sin duda estará muy familiarizado con el concepto de mantenimiento preventivo y puede que se pregunte en qué se diferencia del mantenimiento autónomo. La respuesta corta es que el mantenimiento preventivo es un componente de una estrategia global de mantenimiento autónomo.
El mantenimiento preventivo es el mantenimiento rutinario que se lleva a cabo según un calendario con el objetivo de evitar tiempos de inactividad inesperados por averías en los equipos. Cuando una fábrica adopta un enfoque de mantenimiento autónomo, la responsabilidad del mantenimiento de la maquinaria recaerá en los operarios y no en los técnicos de mantenimiento. Y, como ya se ha mencionado, una de las ventajas de que los operarios asuman la responsabilidad del mantenimiento es que es probable que se lleve a cabo con mayor regularidad que si se dejara en manos de técnicos sobrecargados de trabajo.
Aunque sólo forme parte de una estrategia de mantenimiento autónoma, no hay que subestimar la importancia del mantenimiento preventivo. Según un informe publicado por la Oficina de Eficiencia Energética y Energías Renovables, una organización puede ahorrar hasta un 12-18% aplicando un programa de mantenimiento preventivo en lugar de depender de medidas de mantenimiento correctivo.
Cómo iniciarse en el mantenimiento autónomo
Si desea cosechar los beneficios de un enfoque de mantenimiento autónomo en la fabricación, hay varios pasos que puede dar para iniciar la transformación:
Defina las normas de mantenimiento para las máquinas y los equipos - Asegúrese de que comprende y documenta las acciones de mantenimiento, y la cadencia, necesarias para mantener los equipos de la fábrica funcionando al máximo rendimiento.
Formar a los trabajadores en los procedimientos de mantenimiento - Los operarios de las máquinas necesitan ser educados sobre cómo llevar a cabo el trabajo de mantenimiento. También necesitan entender que tienen un papel vital en el enfoque de mantenimiento autónomo de la organización para optimizar el rendimiento del equipo en la planta de la fábrica.
Establezca un programa de mantenimiento regular - Además de recibir formación sobre los procedimientos de mantenimiento, los operarios de las máquinas deben comprender y comprometerse a llevar a cabo el mantenimiento necesario según un programa regular.
Supervisar e inspeccionar el equipo después de cada uso - La formación de los operarios de las máquinas debe incluir la enseñanza de la importancia de supervisar e inspeccionar regularmente su maquinaria para detectar posibles problemas.
Identificar y eliminar las causas del desgaste excesivo - Para maximizar la vida útil y el rendimiento de las máquinas y otros equipos, las organizaciones deben comprender cómo eliminar el desgaste excesivo. Esta información debe transmitirse a los operarios para que puedan incorporarla a sus actividades cotidianas de mantenimiento autónomo.
Desarrollar una cultura de mejora continua - La implantación del mantenimiento autónomo puede considerarse como un paso en una transformación organizativa más amplia que incluye el desarrollo de una cultura de mejora continua.
Por sí solos, cada uno de estos pasos iniciales tiene el potencial de aportar mejoras significativas dentro de una operación de fabricación. Cuando se implementan juntos, los impactos pueden agravarse a medida que sus organizaciones cosechan los beneficios de progresar en su viaje hacia el mantenimiento autónomo.
Cómo ayuda Tulip a hacer posible el mantenimiento autónomo
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